Hay
ocasiones que mi corazón solo desea orar, así que me retiro a mi habitación de
meditación cierro mis ojos respiro profundo dejo la mente en blanco y me
relajo, en ocasiones voy a lugares con mi ángel, hoy por ejemplo me vi pequeña
jugando en una fuente de agua y Julián mi ángel me tenia cargada
“En el fondo nunca has perdido esa
esencia de niña, siempre fuiste amada por todos y por eso creíste que debías
satisfacer a todos con las decisiones que tomabas para seguir siendo querida
por ellos, pero tu vida y destino nunca podrá ser guiado por lo que piensen o
quieren los demás, es lo que tu vida y solo tu sabes cual es el camino que te hará
sentir orgullosa y feliz contigo misma”
Hoy
Julián se veía tan hermoso, siempre con su sonrisa amplia y llena de ternura y
de infinito amor, hoy no vi su tunica de color azul como siempre, hoy estaba de
un blanco luminoso hermoso.
El
Siempre ha sido un gran maestro para mi y mi mayor paño de lagrimas cuando quizá
siento que las fuerzas me abandonan, por eso en mi corazón siempre habrá una
gran gratitud y amor por mi ángel.
Luego
sentí que era momento de hablar con Dios, siempre lo hago, puesto que El es el
pilar de mi vida, mi principal fortaleza, es verdad los ángeles me guían y los
amo con todo mi corazón como mis hermanos, pero Dios es mi padre y siento que
puedo confiar en el totalmente.
Hoy
solo me dedique a sentir y a recordar todos los momentos en los que sentí amor,
mi deseo era expandir todo ese amor lo mas que pudiera, en mi casa, en mis
familiares, mis amigos y en mi trabajo. Agradecí eso hice desde el fondo de mi
corazón sin decir una sola palabra, se que Dios me escucho y que si por ahí tengo
algún inconveniente este se solucionara de manera positiva, de eso no tengo la
menor duda.
Y
así en silencio me quede un buen rato escuchando solo música, solo estando y
siendo yo misma.
Ingrid Alegria