MAESTROS PARA TODO

Hola a todos mis cyberangelitos;

El día de hoy recibí un mensaje de mi muy querida amiga bertha, en ella me contó una hermosa experiencia de la cual saco un gran enseñanza y se las quiero compartir a todos ustedes.

Hace tiempo leí en alguna parte  que los perros y los gatos venían de Sirio a enseñarnos el amor incondicional.

Mi mirada de inmediato se posó en mi perrita cocker spaniels que dormía tranquilamente  a mis pies. 

Miles de recuerdos pasaron por mi mente y reconocí que en verdad estos pequeños animalitos son una verdadera muestra del AMOR INCONDICIONAL. Ese amor que no pone condiciones para amarnos.

Ella sintió mi mirada, abrió los ojos mas tiernos que he visto, me observó atenta y en cuanto sonreí, brinco hacia mi, lamiéndome y moviendo la cola.

Tu eres la maestra que me enseñará el amor incondicional?_ le pregunté riendo.

Y ella brincaba jugando festejando mi descubrimiento.

Desde entonces empecé a observarla con atención.

No importa en que parte de la casa esté, si estoy en la cocina o barriendo los patios, ella siempre está a mi lado.

No importa si la ignoro todo el día o la regaño, ella siempre me ofrece todo su amor.

Si acaso estoy molesta, ella se queda quieta esperando a que se me pase.

Si me ve triste, pone sus patitas sobre mis piernas y recuesta su cabeza sobre mi.

La observo profundamente dormida a mis pies, y solo necesito pararme para que ella interrumpa su sueño y me siga.

Cuando salgo a la calle, permanece echada en la puerta, no importando si me tardo horas, y cuando regreso arma en unos segundos toda una fiesta.

Si acaso permanezco en cama por estar enferma, no hay poder que la aparte de mi lado, siempre esperando a que me restablezca.

Y si me ve llorando de inmediato me trae su pelota de goma para que juguemos.

Yo no se si en verdad estos animalitos vienen de Sirio, pero ella es quien me ha enseñado el amor incondicional.

Te amo a pesar de que me ignores.

Te amo a pesar de que a veces me hagas daño

Te amo aunque te equivoques

Te amo a pesar de TODO!

Desde esa vez comprendí que hay maestros para todo a nuestro lado,  solo tenemos que abrir los ojos y ver detrás de la apariencia, siempre hay una enseñanza!

Tal vez alguien que nos hace mal, sea un maestro para enseñarnos a perdonar.

Tal vez ese alguien que nos ignora, sea un maestro de la paciencia.

Tal vez aquel que grita, sea un maestro para enseñarnos a escuchar.

Desde entonces observo con atención todas las personas o situaciones que llegan a mi vida.

Busco la enseñanza doy las gracias, y si la aprendo la mala situación desaparece, trayendo a mi vida la armonía.

Dios está detrás de todo!

Lo ves?

Siempre en la luz

Bertha Alicia